Ya hace algo más de un mes que Álvaro del Moral fuese nombrado (por segunda vez) técnico del Atlético Levante. Lo hizo en un contexto desolador: a un punto del descenso, tras el cese de Euge y con una plantilla anímicamente por los suelos. Fue como una aparición divina que se postró sobre Buñol para renacer al filial granota. Dicho y hecho: la victoria ante el Villarreal ‘C’, con remontada incluida, fue el inicio de un resurgir esperanzador que dio más motivos tras apear al Roda y Benidorm consiguiendo tres triunfos seguidos que solo el Utiel pudo frenar en La Celadilla. Esta entrevista fue grabada antes del partido contra el Ontinyent 1931, que se saldó con derrota para los granotas por 2-0. A pesar de caer por segundo partido consecutivo, el equipo sigue peleando aunque el fuego del descenso ya se va notando.
Llegaba a un filial torpedeado
En la charla, no podíamos empezar sin preguntarle por cómo recibió esa llamada por parte del club para entrenar al filial que estaba casi desahuciado cuando su Juvenil A estaba llegando a su ‘peak’ particular: «El inicio de temporada no fue bueno y hemos ido creciendo con el paso de las jornadas. Estábamos en un punto donde ya hay mucho conocimiento de los jugadores, también de la categoría y el equipo (JDH) estaba funcionando muy bien y disfrutando mucho. Las situaciones del fútbol, por circunstancias que a nadie le gustan, llevan a que un compañero deje de ser el entrenador del equipo y te toca cogerlo. Hay que arrimar el hombro, hay que estar. Es un reto bonito y vamos a afrontarlo con mucha ilusión» comentaba Del Moral sobre una situación inesperada, pero no nueva porque él ya entrenó de ‘cabo a rabo al Atlético Levante la temporada pasada junto a Héctor Rodas.
El entrante de este menú degustación no eran precisamente unas cocochas de bacalao: venía el Villarreal ‘C’ con la flechita hacia arriba que además se puso 0-1 muy pronto. «Esa semana fue muy intensa, pasó todo rapidísimo con la sensación de querer llegar a muchas cosas, pero también teniendo la certeza de que los chicos están trabajados. Llevan tiempo en la escuela, tienen su bagaje y había que llegar con esa energía suficiente para no sentirse inferior a un rival, como bien dices, de los exigentes de la categoría que estaba en el playoff y con una plantilla muy top»
Un partido que cambió todo
El gol de Hinojosa no hizo cambiar la mentalidad y a base de buen juego e insistencia, le dieron la vuelta al marcador reflejando que este equipo ya tenía otro aire: «Pues de principio se te pone de espaldas porque en una acción puntual te llegan y te hacen gol, pero el equipo se repuso y fue a por el empate, le acabó dando la vuelta y luego tocó sufrir. Yo creo que fue eso lo que necesitaba el grupo: una remontada, en casa, ganar, que nos estaba costando y con la sensación de que todos fueron importantes, tanto la gente que entró como la gente que aportó en la segunda parte.
Y desde ahí estamos intentando funcionar: el hecho de que la gente se sienta importante y que sientan que son capaces de poder competir contra cualquier equipo». Álvaro sabía que las piezas del puzzle tenían que ser recolocadas para sacar una mejor versión e hizo saber a su equipo que si estaban en el filial era porque habían hecho méritos suficientes. «Ponernos a trabajar en un bien común y desde la exigencia de montar a la gente en el mismo carro para lograr la meta. El partido contra el Villarreal ayudó no solo por el resultado, sino por cómo compitieron los chicos»
En verano se hicieron 8 incorporaciones que, por el momento, no han dado el resultado esperado y nadie comprendía cómo una plantilla de ese nivel (sumando a los que subieron del Juvenil A campeón en la 23/24) estuviera tan abajo. Álvaro lo justificó con la inexperiencia de la mayoría de futbolistas alegando que era y es una categoría que desconocían. «Intentas ponerle un punto de realismo: ni antes éramos tan malos ni ahora somos tan buenos. Esto va poco a poco, trabajando en el día a día. El objetivo principal ya sabemos cuál es, pero sobre todo, queremos potenciar la mejora de cada jugador para prepararlos de cara al primer equipo«.
El fútbol no espera a nadie y más en situaciones escabrosas. Y es que en su ‘redebut’, Álvaro alineó a Aitor Manzanedo, lateral del Juvenil A, ante el Villarreal C. Fue la principal novedad sumada a la titularidad de Nacho y Martín en la defensa. No le tembló el pulso y así lo explicó: «El nivel de Aitor ya lo conocía y me hacía estar tranquilo con la decisión tomada. En ese momento, Serrano estaba lesionado y Kareem (extremo) estaba teniendo que jugar de lateral izquierdo. Pensaba que a Tundé había que acercarlo al área rival y al final no fue una decisión difícil. En el Juvenil A, los chicos funcionan y cuando llega la oportunidad y están preparados, hay que subirlos. Como ha sido el caso de Aitor»
«Nacho está haciendo méritos para poder estar donde está»
Sin irnos mucho de la posición de lateral, tocaba profundizar en el hombre de moda en la cantera granota: Nacho Pérez (Turís, 2008). El míster se deshacía en elogios con el joven defensor que empezó con el Liga Nacional, en la jornada 6-7 se enroló con el Juvenil A y en diciembre subió al filial con el que lleva ya 11 titularidades. Del Moral destacaba el compromiso, disciplina y profesionalidad de un jovenzuelo que está quemando etapas de una manera vertiginosa. «Su rendimiento es bueno, se adapta muy bien y muy rápido.
Es un chico que te lo da todo y se adapta bien a cualquier contexto de exigencia. Se lo ha ganado«. La factoría de Buñol sigue exportando buen material y el entrenador madrileño resaltaba que a los chicos hay que ponerlos cuando haya una necesidad. «Solo hay que echar un vistazo al primer equipo o a los que han salido fuera. Gozamos de mucha salud y esto es el premio al trabajo bien hecho en F8, F11, desde la dirección de escuela, captación, coordinación… Todos aportamos nuestro granito de arena para ayudar a los chicos«
Ver que jugadores, que han pasado por sus manos, como Xavi Grande, Carlos Espí, Marcos Navarro… están en la élite supone un orgullo y una alegría inmensa para él. Recalca que a los jóvenes talentos hay que darles la oportunidad de mostrarse, a pesar de que no todos tienen los mismos tiempos de ‘cocción’. El caso de Nacho Pérez ha sido excepción a la norma porque con 16 años está viviendo cosas que en teoría tendría que experimentar con 20-21. Cada caso es un mundo.
«Muchos chicos quieren todo ya y para eso están los entornos. Para dar tranquilidad y ponerles en el sitio adecuado. Nuestro trabajo está en eso también: en hacerles ver que cada uno lleva su proceso y habrá momentos donde uno juegue más y otros en los que juegue menos, pero la diferencia está en cómo afrontas eso. Esto es una carrera de fondo«.

«Los chicos tienen que estar preparados para cuando pueda surgir esa oportunidad»
El fútbol es cambiante y hay jugadores que han llegado arriba a base de muchas carambolas (pero también debido a su esfuerzo y talento). Tienen que alinearse muchos factores para que eso ocurre, pero Álvaro comenta que «lo que depende de uno, tiene que estar» refiriéndose a que el trabajo propio tiene que ser muy esmerado. «Hay que vivir el presente». Sobre su relación con Héctor Rodas, Álvaro destacó su gran trabajo con él en el filial durante la 23/24. «Estar con él fue un privilegio hasta que en febrero hubo cambios y Felipe (Miñambres) asume el cargo de entrenador en el primer equipo y Héctor sube con él junto a Beni y Dani. Trabajamos muy a gusto y los chicos estaban encantados» Es una figura que conoce la casa y hasta junio se hará cargo de la dirección deportiva del club.
Para finalizar, le pedimos un deseo personal a Álvaro (obviando la más que ansiada salvación) y dejó una respuesta curiosa: «Seguir disfrutando, aunque parezca algo extraño dada la situación en la que estamos metidos. Ahora estamos disfrutando porque he tenido la suerte de llegar al filial con un cuerpo técnico maravilloso que ya conocía. El día a día es súper sano, noble y muy satisfactorio. Eso para mí es lo más importante. Seguir compitiendo para ganar y poder estar donde queremos estar«. La tarea no va a ser sencilla puesto que el descenso achucha, pero con esta implicación, ganas de trabajar y mejorar, que nadie dude que el filial granota se va a dejar la piel para mantenerse en Tercera RFEF.