Media docena de jugadores que militaban en las categorías de formación del Levante UD jugarán a partir de la temporada 2017-2018 en la Ciudad Deportiva de Paterna después de que el Valencia los haya reclutado en su escuela. La información, destapada en por Las Provincias, confluye y diverge en base a las versiones de ambos clubes.
Los hechos son que entre cinco y ocho futbolistas que militaban en la cantera de Buñol cambiarán de aires este verano. Todos finalizaban contrato el 30 de junio de 2017. Ese es el principal argumento desde el Valencia, cuyos responsables insisten en que se ha actuado con lealtad en las operaciones y no se ha ‘tocado’ a ningún futbolista con contrato. «El Valencia tiene la obligación, como cualquier club, de tener a sus ‘scouts’ y ojeadores pendientes del fútbol base y de saber qué jugadores pueden resultar interesantes. Cuando llega un ofrecimiento, si resulta interesante y el 1 de julio está libre, lo valoramos», recalcan.
«Nunca llamamos a ningún jugador ni ningún padre con contrato en vigor», insisten, al tiempo que admiten que ha sido un verano con «muchos ofrecimientos» que han llegado a las oficinas de Paterna tanto de futbolistas como de entrenadores.
En el Levante la versión es contrapuesta. Son conscientes de que cada verano hay un flujo habitual entre los clubes de élite de futbolistas en formación (el propio Levante, el Valencia y el Villarreal), pero creen que el número de jugadores de este verano supera los parámetros normales.
Hace unos meses se rumoreó la existencia de un pacto de no agresión entre clubes. Ambas entidades lo niegan. De hecho, el único contacto se produjo de manera informal entre los responsables de ambas instituciones (Quico Catalán y Mateu Alemany), pero sólo en forma de sondeo. La manera en acometer posibles incorporaciones de escuelas ‘rivales’ sigue dependiendo, a día de hoy, de la buena predisposición y la cordialidad que se quiera demostrar con otros clubes.
Como suele suceder, los factores externos y las reestructuraciones internas afectan al rumbo y decisiones deportivas respecto a los jugadores en fútbol base en escuelas de élite. El verano de 2016 fue particularmente ‘movido’ en Paterna debido a que era el primero de Jose Ramón Alesanco como director en la Academia VCF (Luis Vicente Mateo tomó el testigo en enero y ha mantenido una línea continuista).
Este verano, algo similar está ocurriendo en Buñol debido al cambio en septiembre de la pasada temporada, con la salida de David Salavert y a que Sergio Gómez tomó las riendas. Y dichos cambios afectan en gran medida a la plantilla de entrenadores con más de dos docenas de salidas, pero -aunque desde el Levante apuntan lo contrario- también influyen en el hecho de que haya más jugadores que vean con buenos ojos un posible cambios de aires. La incertidumbre promueve este tipo de movimientos.
Focalizando el asunto en nombres propios, en el Levante ha dolido particularmente la marcha del mediocentro Gastón Alonso, que pertenecía a la cantera granota desde los 8 años. El Valencia firmó hace unas semanas a un futbolista prometedor que entra en su etapa juvenil y que incluso ha sido convocado para entrenamientos con la Selección Española sub-16. En la otra acera, el Valencia no renovó a Marcos Chumillas, jugador con peso en su equipo Cadete A la temporada pasada y que militará en el Levante Juvenil B en la temporada 2017-2018.
Nada soy un forofo de jóvenes y es por que en C.d.tauste A juvenil (Aragon) hay dos chavales de 2 año de juvenil
QUE son una maravilla son Gemelos y tienen unas condiciones tremendas Sergio y Jorge
Ala vez que juegan los sábados con su equipo
Los domingos van con el 1 regional nada es por si os interesa ir a verlos no os disgustaran un saludo y adiós esto lo hago porque me gusta mucho el fútbol base nada mas