Instaurar una ley que regule y controle los comportamientos violentos dentro de aquellos lugares o recintos donde haya menores practicando deporte. Desde hace unos días, el proyecto está disponible en Change.org para que cualquiera pueda firmar y adherirse. La iniciativa ha surgido espontáneamente desde Valencia (Ágata Robles es su impulsora) y pretende erradicar de un plumazo las imágenes lamentables que se producen cada fin de semana en los recintos deportivos de nuestro país.
«Si no queremos que nuestros hijos se críen y crezcan pensando que lo normal y cotidiano es recibir insultos y amenazas; si, como yo, creéis que practicar un deporte y competir no tiene que estar vinculado a la violencia verbal y en muchos casos física, contra los propios jugadores o hacia los arbitros y entrenadores (…) firma esta petición«, explica la impulsora.
Dentro de la lista de comportamientos reprochables que enumera están «no saludar al rival», «no felicitar al rival tras la derrota», «llamar hijo de puta al árbitro», «decirle que le van a romper las piernas», «gritar a niños de 11 años», «invitarlos a que machaquen a sus rivales», etc.
«Al igual que obligan a tener una ambulancia en los campos de fútbol o en cualquier evento deportivo», explica, «solicito que se obligue a tener una persona con autoridad para echar a quienes estén practicando ese tipo de violencia de los recintos donde hay menores». La petición también pide que la ley obligue a los clubes que organicen competiciones «a velar por la salvaguarda de los derechos de los menores e impidan que estas situaciones pasen».