El trabajo, predisposición y disciplina de Aitor Manzanedo (Valencia, 2006) se han visto recompensadas con una renovación pura y dura made in Buñol. El Levante UD ha anunciado que el lateral zurdo seguirá en la cantera granota al menos 2 temporadas más y es que en el contrato anterior figuraba un 1+1 que se ha activado por parte de la entidad en base a objetivos cumplidos. Manzanedo llegó al LUD el verano pasado en un movimiento que adelantó en exclusiva este medio firmando un acuerdo hasta junio de 2025 con opción a prorrogar el vínculo un curso más. Debido a su buen desempeño durante el presente curso, la directiva lo ha renovado por dos campañas más, hasta el 30 de junio de 2027.
El impacto de Aitor en el Juvenil A caló desde el mes de agosto (en plena pretemporada): empezó jugando como central zurdo, pero en octubre, Álvaro del Moral lo reubico a la posición de lateral izquierdo, que no era un hábitat desconocido para él. Con 21 partidos jugados en DH hasta el momento (solo se ha perdido 4 por estar con el filial), el defensor se convirtió desde el inicio en un futbolista capital para un Levante Juvenil A al que le costó pegar el ‘petardazo’ inicial y engancharse al grupo de arriba. Sin ser un futbolista de muchas florituras y highlights, Aitor destaca por su disciplina y continuidad: su faena la hace bien. Defender con rigor siendo firme y tenaz. Un ancla constante y un escudo inexpugnable para los dos centrales granotas, que cuentan principalmente con Aitor para empezar la salida de balón por el franco izquierdo.
Puede parecer un zaguero recatado, pero de vez en cuando, coge la moto y sube la banda. Y en esas ocasiones puntuales ha salido cara: con el B ha asistido hasta en dos ocasiones para que Alcañiz y Kareem marcasen dos goles. Su jugada es muy típica, pero eficaz como ella sola: se asocia con el pivote/interior de turno, le coge la espalda a su homónimo en la izquierda y pone un centro raso a la segunda línea. Como decíamos, la gran labor que estaba haciendo en el JDH hizo que Álvaro del Moral se lo llevase consigo cuando fue nombrado entrenador del filial. Y fue una sorpresa porque con Martín Krug y Nacho Pérez (juveniles de último y primer año respectivamente) parecía que no iba a haber otro ascenso ‘baby’ en la defensa levantinista. Del Moral se la jugó y apostó por un chico al que conocía de maravilla y que siempre le había dado un rendimiento óptimo. El día que el técnico madrileño redebutaba con el filial alineó a Aitor sin temblarle la mano.
Aitor debutó en Tercera RFEF en un duelo a vida o muerte: venía el todopoderoso Villarreal C estando los de Orriols un punto por encima del descenso. Parecía una locura alinear a 3 juveniles sabiendo cómo estaba el panorama, pero la elección salió de 10 porque Álvaro dio continuidad a lo que le funcionaba en División de Honor. Desde entonces, ni con agua caliente ha salido Manzanedo del XI: 3 titularidades contra Roda, Benidorm y Utiel con un bagaje de 6 de 9 (más el triunfo ante el segundo filial amarillo). Lo cierto es que esa posición ha sido una gotera constante desde principio de temporada: David Serrano no es lateral y ha estado lesionado un tiempo. Se optó por Kareem, que es un extremo natural, y el experimento tampoco funcionó. La apuesta de Aitor ha sido un 10/10 desde una perspectiva global.
Granota de cuna después de haber estado 5 años en la cantera durante su etapa en fútbol 8, Aitor ha estado en equipos como el Patacona y Alboraya. El año que viene ascenderá de manera evidente al filial con un paso natural y lineal puesto que ya conoce al equipo, se ha acoplado y además está teniendo minutos de calidad. Su último año de juvenil no puede estar yendo mejor.