Una de las victorias más importantes en las profundidades del Grup Sud de la Lliga À Punt Comunitat llegó en el Gerardo Salvador, donde el Paterna CF se vio sorprendido por una UD Carcaixent que venía de dos derrotas consecutivas y logró revertir su dinámica con un triunfo vital (1-2) que le aleja de las posiciones de descenso a Primera FFCV. Este miércoles, su entrenador Xesco Ortiz repasó en la sección ‘El Futbol Més Nostre’ de la radio de À Punt las claves de un recién ascendido a la categoría que, por el momento, mantiene su cabeza fuera del agua y por encima de los tres últimos clasificados de la liga.
¿Qué balance hace del triunfo ante el Paterna CF?
Llevábamos dos derrotas duras contra Independiente de Alicante y Calpe porque no habíamos merecido quedarnos sin sumar en ambos partidos. Afrontábamos el duelo ante el Paterna con la tensión esperada, presión porque eran dos equipos de la zona baja… Al final fue un choque de pocas ocasiones, poco atractivo, mucha precipitación y nos lo llevamos nosotros porque tuvimos más eficacia.
¿Contribuyó a la presión el hecho de jugar contra un rival directo en la zona baja?
Sí, claro. Ahora ya, a falta de ocho jornadas, la diferencia de puntos es poca y nos estamos jugando la permanencia entre cuatro o cinco equipo. El hecho de lograr un resultado positivo en Paterna también nos hacía ganar el goal-average directo con ellos, era importante.

A falta de saber qué ocurre con el recurso contra el CF Gandía que podría incluso aumentarla, la diferencia actual respecto al descenso es de tres puntos. ¿Asumían una temporada tan ajustada con la zona baja?
Desde el principio lo tomamos como una temporada de estabilización del equipo en Lliga À Punt Comunitat, es nuestro primer año. Es una liga muy igualada, los partidos se deciden por detalles para sumar o restar puntos. Tuvimos la mala dinámica de no puntuar en los primeros partidos y eso nos ha castigado: encadenar dos o tres victorias ha sido muy complicado. Estamos ahí abajo luchando por el objetivo que teníamos desde principio de año, que era la permanencia.
Es su tercera temporada en la UD Carcaixent, incluyendo un ascenso el año pasado. Hay mucho cambio de entrenador últimamente: ¿cómo explica esa estabilidad tras tres años en el mismo club?
En realidad son siete años, porque estuve los primeros tres en el equipo filial en Segunda Regional: logramos ascender y luego estabilizarlo en Primera. Al coger al primer equipo, la suerte y el trabajo son ingredientes clave para obtener buenos resultados, pero también la confianza que nos dio la directiva. El presidente y los demás nos dejan trabajar, valoran lo que hacemos y es coherente con lo que nos piden. Este año hemos renovado al 80% de la plantilla de Primera FFCV, sabíamos que sería un año duro. Hemos estado todo el año en esa línea, ojalá estuviésemos mejor. El ingrediente fundamental es la confianza.
Cerramos con el duelo ante el Redovan el próximo fin de semana, un rival que ocupa la zona media de la tabla. ¿Sería hilar dos victorias un espaldarazo de confianza definitivo?
Claro, porque tirando de matemáticas creemos que nos faltan 9 o 10 puntos para lograr el objetivo de la permanencia. Ante el Redovan lo trataremos como una final: el objetivo de esta segunda mitad era asegurar la victoria en los partidos de casa. Somos conscientes de su importancia, esos tres puntos nos darían tranquilidad y también meterían a otros equipos en la lucha, para que no sea sólo una permanencia disputada entre cuatro equipos.
