La lucha por la Copa del Rey está más viva que nunca después de que el Roda haya sorprendido al Castellón con un triunfo merecido (sobre todo, visto lo visto en el segundo acto) que deja a los gualdinegros en la 4ª plaza a la espera de que el Levante juegue su partido aplazado del próximo miércoles ante el Conquense. Todo el respeto que se tuvieron los dos equipos en los primeros 45′ desapareció en la segunda mitad cuando el Roda apretó el acelerador y comenzó a bombardear el área ‘orelluda’. El gol de Alberto Franco hizo justicia y la última jornada decidirá qué dos equipos acompañan a Elche, Valencia y Villarreal en la Copa.
No empezaron mal los pupilos de Alejandro Jiménez que avisaron sobre la portería de Polo por medio de Miguelón. El ‘9’ recibía de Zamudio, su disparo lo desviaba el portero y Óscar Gil sacaba la pelota de debajo de los palos. Susto de los gordos para un Roda que había entrado al partido con demasiadas marchas puestas. Al tiro de Miguel Ferrer, respondió Carlos Macià que no pudo encontrar portería con un testarazo llegando desde atrás. Esa oportunidad cambió la tendencia del partido: en ese momento, eran los locales los dueños del esférico y se estaban acercando con más peligro sobre la portería de Emilio. En una de esas, los de Marcos Pereira pudieron hacer el 1-0, pero fallaron lo más fácil. Alcaide encontró entre líneas a Óscar Gil que asistió al punto de penalti a Javi Aguilar. En boca de gol, el ’19’ la tiró, literalmente, al muñeco. Emilio solo tuvo que dejarse caer al suelo y empomar la pelota cuando el resto de la portería estaba vacía. Había sido la mejor oportunidad de todo el primer acto justo antes de que Dennis avisase con un disparo a la media vuelta.
Al descanso, el Roda había mejorado con el paso de los minutos y el Cs había perdido esa tranquilidad que le caracterizó durante los primeros compases de la contienda. Los fantasmas de la primera mitad se le volverían a aparecer a Javi Aguilar que volvió a fallar en el mano a mano. Emilio se mantuvo firme y sacó el disparo con todo en contra. Se podía sentir la desesperación en el banquillo del Roda que vio como Sergio Barrera desperdiciaba otra gran ocasión llegando desde segunda línea. El gol se resistía y el Castellón estaba cada vez más fuera de combate. Los locales vieron una autopista por la banda izquierda y, en una transición liderada por Alcaide, Alberto Franco definió de maravilla para poner el tan ansiado primer gol.
La diana del ’17’ acabó por matar al Castellón que se convirtió en una gotera constante que no tiene parches para poder detener el agua. Del mismo modo que el gol, Alcaide encaró a Emilio y su vaselina, bellísima por cierto, se estampó en la madera ante el ‘¡oi!’ de la grada. Los de JIM lo intentaron en los últimos compases, pero sin poder generar peligro real sobre la guarida de Polo. Con este triunfo, todo se aprieta por arriba y la próxima jornada dictará sentencia: Valencia-Roda y Levante-Castellón. 4 contendientes por 2 plazas.