A través de un escueto mensaje en redes sociales, el Valencia CF confirmaba el pasado domingo 30 de junio que daba por finalizada su vinculación con el guardameta Juan David Terrádez después de trece temporadas vinculado a la escuela valencianista.
El portero llegó a Paterna tras superar unas pruebas de acceso en el año 2011 con apenas seis años, y deja el club con 19 años recién cumplidos después de que la dirección deportiva decidiese no ejecutar el +1 en el contrato que ambas partes firmaron el pasado mes de diciembre.
El club apuró hasta última hora para tomar una decisión respecto al portero, que posee la triple nacionalidad (española, francesa y ecuatoriana) y que en temporadas anteriores llamó la atención incluso de las categorías formativas de la selección de Ecuador. De hecho, durante meses se ha hablado de una posible convocatoria con Ecuador sub20, que disputará el Mundial de la categoría en 2025, aunque para ello el seleccionador Miguel Bravo necesitaba que el portero tuviese continuidad en su club.
Finalmente, la situación de la portería del Juvenil ‘A’ le ha pasado factura al meta, que apenas ha tenido ocasión de jugar en la temporada 23-24: su expediente sólo puede reflejar 90 minutos disputados en la última jornada ante el Real Murcia, en un choque intrascendente que el Valencia ganó a domicilio (0-1) con una buena actuación del guardameta.
Durante toda la campaña, los porteros titulares del Juvenil ‘A’ han sido Vicent Abril (20 partidos) y Raúl Jiménez (10 apariciones).
En ambos casos, su continuidad y condiciones no sólo han sido del agrado de los dos técnicos esta temporada –Paco Cuenca primero y luego Miguel Ángel Villafaina-, sino que también gozan de la confianza de los técnicos de la selección española: Jiménez ha sido un habitual de la sub18 y ahora en la sub19; y Abril también durante muchos meses fue un fijo bajo palos en la selección española sub19. Este último es la verdadera apuesta de los técnicos de Paterna de cara al futuro de la portería del primer equipo.
Durante meses, Terrádez ha esperado la ocasión en División de Honor, incluso con la opción de arrancar la pretemporada 24-25 con el VCF Mestalla a las órdenes de Angulo si el club hubiese hecho efectivo el año de contrato que le restaba. Con el camino hacia el filial ‘cortado’ por sus compañeros bajo palos en el Valencia y tras finalizar su último año como juvenil, Juanda abandona la Academia VCF con la mochila repleta de experiencia en una escuela de élite y ganas de demostrar su valía.
Más allá de la categoría deportiva de su próximo destino, su entorno desliza que la prioridad máxima es jugar y gozar de oportunidades bajo palos tras un año muy duro en el que no pudo mostrar sus condiciones en Paterna.