El fin de semana pasado nos dejó uno de los grandes partidos de la jornada en División de Honor Juvenil, con la remontada en casa del Alboraya UD ante el Patacona CF (2-1) y tres puntos más que consolidan al cuadro chufero en el ‘top’ de la categoría. Instalados en la quinta posición y con una escuadra conjuntada y versátil, su capitán Toni Tamarit encarna perfectamente las señas de identidad del equipo: sentido de pertenencia, flexibilidad sobre el césped y mucho compromiso.
Tamarit (18 años, 22 de noviembre de 2005) pasó por los micrófonos de ESPORTBASE Radio para analizar, en primera persona, un triunfo que sabe mejor al tratarse de un ‘derbi’ de Alboraya: «Las semanas siempre empiezan bien cuando sumas de tres. Enfocamos cada entrenamiento de cara al rival, ganar los tres puntos siempre nos deja contentos y más contra un equipo como el Patacona, la victoria deja muy bien sabor», expresó. Toni disputó casi todo el partido -fue sustituido a cinco minutos del final- y destacó el descanso como punto de inflexión: «Este año nos caracteriza que, aunque empecemos perdiendo, nunca bajamos los brazos y siempre vamos a tope. El míster nos dio una buena charla motivadora al descanso, y cuando empatamos con el 1-1, sabíamos que nos íbamos a llevar el partido».
EB Radio: escucha aquí la entrevista a Toni Tamarit (19 de febrero de 2024)
Y eso que su estado físico no era el mejor, porque el capitán venía de pasar una semana difícil por una inesperada enfermedad: «No suelo ponerme malo, pero la semana pasada contra el Fundación Albacete empecé a encontrarme mal. Pensaba que me recuperaría, pero no había manera. Fui el miércoles a entrenar y tuve que parar a los veinte minutos. Al final resultó ser una bronquitis, llegué muy justo al partido contra el Patacona», expuso. Llegar algo renqueante no fue obstáculo para colaborar en un nuevo +3 para su equipo, que no se metió al final de la primera vuelta en Copa del Rey «por el goal-average» y que, a pesar de su buena clasificación, no olvida que al empezar cada temporada el objetivo es mantener un año más al Alboraya en División de Honor, «aunque todo lo bueno que venga luego lo cogemos con los brazos abiertos».
El valenciano inició su trayectoria deportiva en el CD Caxton College, colegio donde estudió siempre, y desde Benjamines en el Alboraya UD. Surgió la oportunidad de ir al Valencia CF, y recaló es un escuela con 11 años. Pero aquella temporada y media posterior no fue positiva para su desarrollo («lamentablemente apenas conté con minutos») y de nuevo regresó al Caxton. «Ese pasito atrás me vino bien para desconectar y volver a disfrutar jugando con mis amigos antes de volver de nuevo al Alboraya, al club que considero y que es mi casa«, asegura.
Su breve paso por la Academia VCF le dejó varias lecciones importantes: «Yo jugaba todos los minutos hasta el momento, pero cuando llegas a un sitio como el Valencia y te encuentras entre ‘elegidos’, la competencia es muy alta y es muy difícil hacerse un hueco. A pesar de no tener el mejor recuerdo deportivo, me vino muy bien para madurar, abrir los ojos y ver que el fútbol no es todo un jardín de rosas».
Este año, el perfil deportivo de Toni -que siempre había sido ubicado en banda- ha cambiado por las necesidades de su equipo. Lo explica a ESPORTBASE Media su entrenador, Sergio Paredes: «Empezó la temporada jugando de carrilero, estaba haciendo un año espectacular. Pero la baja de Mario obligó a acoplarle a la posición delantero centro, y sigue jugando ahí porque le da mucho al equipo: salida de balón, aguantarlo, velocidad, juego aéreo, juego de espaldas…». Paredes, además, destaca su carácter y peso en el vestuario al portar el brazalete: «Es un un jugador super importante para el grupo. Un capitán ejemplar, siempre está animando y dando la cara. A nivel deportivo, está haciendo un año escandalosamente bueno tanto lo que aporta con goles como en el trabajo que hace sin balón. Ojalá sigamos con la racha que llevamos y que todos los chavales sigan aportando como hasta ahora. Toni es imprescindible para el equipo».
Adecuarse a nuevo rol como delantero de referencia ha sido, según Tamarit, algo más sencillo de lo previsto. «Gracias a Dios me he adaptado muy bien, los entrenadores me han ayudado mucho en los entrenamientos con instrucciones de cara a hacer la presión, basculaciones… Hacen todo para que mejore», reconoce. «Yo he jugado en muchas posiciones, pero este año empecé en banda como carrilero, me estaba acoplando bien pero luego por circunstancias me tuve que adaptar en punta. Todo por el Alboraya, como si me tengo que poner de portero. Me adapté a la posición, me gustó, por mi envergadura tuve facilidad para ello y además tuve una buena rachita de goles en los primeros partidos».
Fuera del césped su vida también incluye su primer año universitario, estudiando un doble grado de ADE y Marketing. «Me gusta el tema de la Economía, el primer cuatrimestre ha ido bien respecto a las notas», admite, aunque también reconoce que el cambio a su etapa universitaria ha afectado a algunos de sus mejores amigos. «Se echa de menos a los amigos de toda la vida, luego otros se echan novia…», dice entre risas.
Tamarit tiene un espejo muy próximo donde mirarse: su tío es Eduardo García Belda ‘Miki’, futbolista en sus inicios y luego leyenda del futsal de la Comunitat como jugador y como entrenador, ya que ganó en el año 2002 la Copa del Rey de fútbol sala con Vijusa Valencia. Toni admite que su tío aplica con él la política del ‘palo y zanahoria’: «No es nada pesado, me quiere mucho y siempre me da muy buenos consejos no tanto en lo deportivo, sino a nivel mental. Tengo la suerte de tener un familiar que ha pasado por mi misma situación, la de querer jugar al fútbol y querer dedicarse a esto plenamente, y siempre me da los mejores consejos. Aunque me mete ‘caña’ también: me insiste en que tengo que mejorar en todas las facetas».
Con apenas nueve partidos por delante, el capitán del Juvenil ‘A’ del Alboraya UD tiene claros los objetivos colectivos: «Quedar lo más alto posible en la tabla. Fue un palo no entrar en la Copa del Rey, era una ilusión que teníamos todos. Partido a partido, a pesar de no ser una cantera profesional, sabemos que podemos competir contra cualquiera. Estoy seguro de que daremos que hablar», asevera. ¿Y en lo personal? «Me pongo objetivos a muy corto plazo. Jugar y aportar al equipo en lo que pueda (en este caso, al jugar como delantero, marcando goles). Estoy muy orgulloso de mi equipo y de la disciplina y dedicación que le ponen todos, por eso estamos en tan buen momento», concluye.