El Ayuntamiento de Alicante ha colocado una plaza de recuerdo en el espacio que ocupada el estadio Bardín, escenario del primer ascenso del Hércules a Primera División en el año 1935.
El estadio, derribado en 1963, recibió su nombre en honor a su constructor, el empresario francés afincado en Alicante, René Bardín, y se inauguró el 18 de septiembre de 1932, siendo su arquitecto Juan Vidal.
La placa incluye una imagen del estadio, conocido durante buena parte del pasado siglo como ‘la bombonera alicantina’ por su diseño, y una breve reseña en la que se recuerdan fechas significativas de la historia del recinto, así como los nombres de sus principales gradas.
El vicealcalde y concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar, explicó que con esta placa se pretende recordar “un estadio en el que se vivieron momentos históricos para el deporte alicantino”, en alusión a los tres ascensos a Primera vividos en el recinto.
El Hércules vivió en este estadio su primera etapa dorada, con varias permanencias en la máxima categoría, interrumpida por la Guerra Civil.
En el espacio que ocupaba el estadio se encuentra actualmente el parque de Les Corts Valencianes, entre los barrios alicantinos de Princesa Mercedes y Alipark.
El recuerdo a Bardín se suma a otra iniciativa realizada años atrás en la que también se rememoró la historia del campo de La Viña, segundo hogar del Hércules y también desaparecido.
En la actual Plaza de la Viña, en el barrio de La Florida, se colocó una placa conmemorativa y se recreó uno de sus córners del desaparecido estadio.
Texto: Agencia EFE / Foto: Ayuntamiento de Alicante