El filial del Villarreal no levanta cabeza y ya acumula 4 derrotas consecutivas en los que ha encajado 10 goles. La racha es muy negativa a pesar de que el equipo de Miguel Álvarez no compite mal. Con 13 puntos en el casillero, los amarillos están muy cerca de la zona de descenso y los rivales directos están empezando a despertar.
Y es que el partido ya iba a empezar cuesta arriba en los primeros 5 minutos. Cote ponía un buen centro desde la izquierda que Otero remataba sin dejarla caer. Primer golpe duro para el minisubmarino que no decayó y trató de llevar la voz cantante del duelo. Ontiveros y Collado tiraban del carro por los costados, pero ni Forés ni Ferrari estaban con el punto de mira acertado. Se hizo con el esférico el filial, pero el Sporting estaba demasiado cómodo.
Sin embargo, después de varios minutos de inactividad, Lekovic envió un balón al poste tras un testarazo en el área pequeño. El rechace le volvió, pero mandó, de manera sorpresiva, el balón fuera. Era la mejor ocasión para el B que vio cómo ese gol cantado no había subido al marcador. Tras el descanso, los asturianos vieron un pozo de petróleo en los contragolpes… y vaya si lo explotaron. Campu aprovechó que el Villarreal estaba desorientado para internarse en el área de Morro y cruzar el balón para poner el 0-2. Jarro de agua fría para los chicos de Miguel Álvarez que no pudieron reponerse del golpe sufrido.
Carlos Izquierdoz tuvo el 0-3 después de rematar un saque de esquina que repelió muy bien Morro, pero Cote, nuevamente a la contra, no iba a fallar. Superó a sus rivales y se la cruzó al guardameta amarillo. Ya en el tiempo de descuento, Aitor Gelardo pudo recortar distancias con un remate a bocajarro que sacó Yánez. Con ese 0-3 se llegó al final y el filial sigue sin remontar el vuelo.
Foto y texto: Villarreal CF/ Xavi Jorquera