Sucedió la semana pasada en Tavernes, donde un partido de fútbol-8 de Femenino Base entre los equipos de Tavernes Blanques y CD Burriana se vio condicionado de manera inesperada: las locales sólo contaban con siete futbolistas en su equipo. Las visitantes, de manera automática, decidieron renunciar a su superioridad numérica (tenían 11 jugadoras en su convocatoria) para igualar fuerzas, lo que les valió una merecida tarjeta verde de ‘fair-play’ por parte del árbitro.
El colegiado reflejó en el acta, al acabar el partido, el motivo del reconocimiento:
«Se muestra tarjeta verde al equipo visitante por la gran deportividad mostrada tras haber jugado con 7 jugadoras para igualarse al equipo local, incluso yendo perdiendo»
La propia directiva del Tavernes Blanques reconoció el gesto a través de sus redes sociales, destacando «la solidaridad y deportividad» del Femenino Base del CD Burriana.
En lo deportivo, el partido comenzó con una ventaja para las visitantes pero, con el paso de los minutos y la igualdad numérica en el césped, el Tavernes se rehizo para ganar finalmente por 7-4. Aunque el marcador fue lo de menos: la mejor victoria de la tarde fue el gran gesto de deportividad del equipo visitante.
Foto: Tavernes Blanques