Los golpes y las caídas hacen más fuerte a los jugadores. Antonio Pacheco es el claro ejemplo de ello.
Antonio Pacheco dijo adiós a la UEFA Youth League, al igual que sus compañeros, de la manera más cruel posible. El equipo de Pere Martí fue eliminado en la tanda de penaltis después de que Westerveld rechazara, sin saber muy bien cómo, el zapatazo de Marcos Sánchez.
El AZ Alkmaar se ha colado en los octavos de final de una manera sorprendente. Incluso para el propio equipo. Marcando 3 goles en el tiempo reglamentario prácticamente de la nada con permiso de la defensa del Villarreal. La crítica siempre constructiva, eso por supuesto. Pero ni Espi ni David Guerrero estuvieron bien. David debutaba en competición y nunca habían jugado juntos. Mangel mejor al igual que Pablo Navarro.
No logro saber cómo un equipo, que apenas daba 4 pases seguidos, consiguiera hacerle 3 goles al Villarreal. Estoy haciendo matrices y ecuaciones de tercer grado y no encuentro la solución. El AZ lo tenía claro. Balones largos y a ver qué pasa. Esos envíos no llegaban a nadie, pero la defensa amarilla se encargó de convertirlas en caramelos golosos.
Daba impotencia ver que el Villarreal no estaba pasando por encima del equipo holandés. Cuando se le apretaba un poquito, al AZ se le veían todas las costuras. Un conjunto sin orden ni concierto. El Villarreal debió hacer sangre. Al final se forzó la prorróga. Un gol de ‘Bachu’ casi al final, pero los penaltis salieron cruz.
Y diréis, ¿qué tiene que ver todo este textaco con Antonio Pacheco? Ahora va.
El callosino ha hecho un buen torneo. Liderando a su equipo a partir de la zona de medios y sacrificándose en muchos partidos. Goles y asistencias para ayudar a que el Villarreal lograra el pase a los 1/16 de final. Pero el callosino no puede. Tira del carro, pero el fútbol es un deporte colectivo. No se le puede echar absolutamente nada en cara. Ha podido tener partidos mejores y peores, pero siempre se ha partido la cara por el Villarreal.
En el partido gélido frente a la Atalanta fue el artífice de que se rescatase un punto dando hasta el último aliento. Ha sido superior a la mayoría de rivales en el torneo y se queda esa espinita clavada por no haber logrado avanzar. Pacheco se enfunda los valores de compromiso, sacrificio y mucho trabajo antes de salir al campo.
En el B no se está siendo justo con él, en mi opinión, pero siempre que tiene la oportunidad de jugar, por pocos minutos que sean, deja buenas sensaciones y ayuda al equipo. Un líder dentro del campo. Ayudando a los más jóvenes en el verde (siendo Antonio del 2002). Va a todas las disputas sin miedo a las consecuencias. Un talento brillante que, por desgracia, no podremos seguir disfrutando en la Youth League.
El equipo siempre es lo primero. Lo mejor todavía está por llegar.
Fotos y texto: Villarreal CF/ Xavi Jorquera