El Valencia se jugaba mucho ante el UDG Tenerife en un nuevo encuentro en el Puchades. Las valencianistas llegaban tras vencer en Copa de la Reina ante el Juan Grande y necesitaban ganar más confianza obteniendo un buen resultado en liga. El partido fue un reflejo de la mala temporada de un Valencia que se vio superado por el Granadilla en todo momento.
El Granadilla arrancó el encuentro con un punto más de intensidad que el Valencia. Es por eso que en prácticamente todas las acciones donde el Valencia trataba de salir con el balón controlado desde atrás, las recuperaciones en campo valencianista por parte de las tinerfeñas eran constantes.
La primera clara ocasión para las visitantes estuvo en las botas de Maria José Pérez. La delantera golpeó con violencia el cuero desde la frontal del área y despejó con una buena estirada Enith. Minutos después, Zaremba realizó una buena jugada que culminó con un centro desde la frontal. El envío era perfecto para Maria José, pero no pudo concretar el remate y sacó Kerlly Real el esférico de la zona de peligro.
El Valencia quiso probar fortuna con algún disparo lejano. Candela chutó desde la frontal y Aline detuvo sin complicaciones. En otra jugada de ataque valencianista, un envió largo fue peinado por Salmi en la frontal del área y, cuando parecía que el balón se marchaba por línea de fondo, Esther Martín golpeaba el balón en una pose poco ortodoxa, pero conseguía introducirla dentro de la meta rival. Cuando todo el mundo celebraba el tanto, la colegiada decretó fuera de lugar y anuló el gol.
A pesar de ese acercamiento, el cuadro insular estaba siendo superior en todo. Pasada la media hora de juego, también sería superior en el marcador gracias a la diana de Blom. Una buena internada desde el sector izquierdo por parte de Pisco acabó con un centro de la lateral rematado por Blom al fondo de la red.
Al filo del descanso tuvo una oportunidad muy clara Asun para empatar. Recibió en el centro del campo un pase al espacio de Salmi y, tras superar a Maria José en carrera y quedarse sola ante Aline, sacó un remate muy blando que detuvo sin complicaciones la guardameta.
En la segunda mitad, la sensación era la misma que cuando acabó la primera parte. Dominio y superioridad clara del Granadilla. Pasaban los minutos y a pesar de ese dominio el marcador seguía siendo corto y eso era algo que beneficiaba al Valencia. En una jugada aislada, el balón cayó a Asun, que cuando fue a rematar fue derribada por Aline. La colegiada señaló penalti y Salmi convirtió desde los 11 metros para empatar el partido.
Poco duró la alegría para el bando valencianista. En un centro de Zaremba el balón se fue envenenando y se coló dentro de la meta defendida por Enith. El tanto en contra mató los ánimos valencianistas. Las de Andrea Esteban no encontraban la fórmula para generar peligro. Intentaban encontrar a Jansen, Olga o Júlia, las tres ingresadas en el segundo acto, con balones largos, pero siempre se anticipaba la defensa tinerfeña.
En el tramo final se jugó a lo que quiso el equipo dirigido por Francis Díaz, que contemporizó perfectamente. Ya en el añadido, la colegiada anuló un gol del Tenerife por fuera de juego de Martín Prieto y, en la última jugada del encuentro, Kerlly Real tuvo el empate con un cabezazo a la salida de un córner, pero despejó Aline y permitió que el Granadilla se llevara tres puntos vitales del Antonio Puchades.
El próximo encuentro de las valencianistas puede decidir muchas cosas para el futuro en la liga. Se medirán al Rayo Vallecano en un duelo clave por la permanencia.