El Villarreal llegaba a Buñol con la necesidad de vencer a un Levante que, tras la última derrota, también necesitaba la victoria. Ante este duelo de urgencias, el planteamiento de las visitantes fue sobresaliente y le bastó para lograr una victoria tan merecida como trabajada
El encuentro arrancó con la igualdad que se puede prever en un derbi. El Levante quería ser dominador del juego, pero la presión alta del Villarreal no daba opción al cuadro local a tener ese deseado control. Además, las llegadas eran del submarino amarillo. Faltaba concretar, pero las aproximaciones peligrosas eran del cuadro de Sara Monforte.
El cuarteto atacante formado por Cienfu, Pinel, Belén y Sheila estaba siendo un auténtico quebradero de cabeza para la zaga levantinista. El juego por banda de las visitantes dificultaba a cuadro granota, que no sabía bien cómo frenar los impulsos atacantes del Villarreal. En varias ocasiones, el cuero llegaba al área custodiada por Mar Segarra, pero al conjunto castellonense le faltó la determinación necesaria para finalizar jugadas que crearan peligro real a la guardameta.
Pasado el ecuador del primer acto, llegó una clara ocasión para el equipo amarillo. Hasta en tres ocasiones dispararon las visitantes. Probó Sheila con un tiro que Mar pudo rechazar y que cayó a las botas de una Belén que, a pesar de su intento, no pudo reaccionar a tiempo para empujar el balón al fondo de la red.
El Levante atacó con balones a la espalda de la defensa amarilla, tratando de aprovechar la verticalidad de Gio y Eva Navarro. Fueron varios los intentos, pero Miguélez y Lara Mata, imperiales en la zaga, impidieron que esas aproximaciones llegaran a buen puerto. Lo más peligroso del Levante en ataque en los primeros 45 minutos fue un disparo de Eva Navarro que salió rozando el poste.
Escasos momentos antes de llegar al descanso tuvo otra buena opción el Villarreal con un remate de cabeza de Pinel que se perdió rozando el poste izquierdo de la meta de Mar Segarra. Esa falta de concreción en ataque impidió que el resultado de moviera en la primera mitad.
Tras el tiempo de asueto, Villacampa decidió introducir cambios que pudieran dotar al equipo de más presencia ofensiva. Entraron al terreno de juego Alba Redondo y Andonova en el lugar de Leire Baños y Jucinara. El plan trazado para el inicio del segundo tiempo se rompió a los pocos segundos.
Una buena internada de Sheila por el flanco izquierdo acabó con un centro raso de la propia delantera que remató Belén a placer para poner el 0-1 en el marcador y desatar la alegría en el bando visitante. Buscó la réplica inmediata Alba Redondo con un zapatazo lejano que se perdió por poco por la línea de fondo. Con un botín inmejorable, el Villarreal todavía incidía más en su presión. Líneas juntas y defensa avanzada que complicaban mucho el trabajo asociativo de las locales.
Estuvo cerca de ampliar su renta el cuadro groguet por medio de Belén. Un balón largo hizo dudar a la defensa levantinista, Sheila cabeceó el cuero y la delantera erró en el mano a mano ante Mar Segarra tras buscar una vaselina fácil para la portera. Una buena acción personal de Eva Navarro estuvo cerca de significar el empate. La murciana dribló a las mil maravillas por banda, sacó el centro e Irene Guerrero remató con violencia, topándose con las piernas de Lara Mata.
Se entraba en la recta final del encuentro y no podía hacerlo de mejor forma para el Villarreal. Una contra lanzada a la perfección originó el segundo gol. Belén cedió el balón para la recién ingresada Tere Morató, que devolvió el cuero con excesiva fuerza a Belén, que no pudo llegar antes que Mar Segarra, pero su despeje fue defectuoso y la delantera aprovechó para poner el 0-2.
En los minutos finales el Levante trató de recortar distancias y lo consiguió en el añadido con un espectacular gol de Cometti desde casi el centro del campo, pero al final no bastó para empatar y el Villarreal consiguió una victoria después de muchas jornadas,