El jugador de Museros del VCF Infantil A volvía a los terrenos de juego tras haberse lesionado en verano, casi en el primer entrenamiento de la pretemporada. Más de 3 meses sin poder jugar. Con 13 años es toda una eternidad. Había que volver poco a poco, en los minutos finales de un encuentro ya bien encarrilado ante el Alboraya UD. Faltaba su gol. Eso le dijo su técnico, Javi Sanchís, antes de salir: «vas a marcar».
Y se dio. En una bonita diagonal desde la izquierda que culminó con un lanzamiento ajustado al palo largo. Explosión de alegría sobre el campo y en el banquillo, con ese abrazo sentido con Javi Sanchis, su entrenador al que le cumplió con la dedicatoria prometida. En el plano deportivo, el técnico suma un efectivo más para un equipo que sigue invicto y líder del G-I de Liga Autonómica. En el plano afectivo y emocional, el grupo también sale reforzado tras haber recuperado uno de los suyos.
Aaron Alcaina había marcado casi un centenar de goles en las siete temporadas que lleva defendiendo la camiseta del Valencia CF. Pero el del pasado sábado fue especial por muchos motivos para él. También la celebración, sentida, con su entrenador en la banda y con sus compañeros sobre el campo.
Imagen y texto: valenciacf.com