Cuando perteneces 19 años a una entidad futbolística y además lo haces desde diferentes cargos, la concepción de las cosas cambia en función de la exigencia de estos. Hay quien sufre más en la presidencia que pisando en el verde y quien entiende que esto no va de cargos, sino de compromiso y crecimiento. Sonia Torres Hernández (13/08/1977), actual presidenta del CFF Marítim, sabe lo que es llegar a un club, tocar todos los “palos” e implicarse hasta el punto de formar parte de él desde su creación. Empezó como jugadora (antes en el Marítimo-Cabanyal) y alargó el colgar las botas hasta 2011; pero durante todo ese tiempo se formó y lo compatibilizó con otros cargos como el de delegada o entrenadora, además de ocupar en la directiva puestos de vocal o tesorera. En 2016 asumió la presidencia de un club que mira siempre por y para la cantera, un club de barrio orgulloso de sus colores marineros al que es difícil tumbar por duros que sean los golpes que reciba, además, desde 2018, forma parte de la junta directiva de la FFCV presidida por Salvador Gomar.
Tiene 44 años y lleva 19 años en el club. ¿Se puede decir que una gran parte de su vida gira en torno a él?
Sí, desde luego. Desde la creación del club he formado parte de su estructura compaginando distintas funciones, desde jugadora, entrenadora, directiva y, en los últimos años, presidente. El Marítim es parte de mi vida y algo que he sentido siempre desde dentro y siempre me he organizado en torno a partidos, entrenamientos y calendarios.
En la última campaña el Marítim cayó desde la Liga Nacional a la Liga Autonómica Valenta. ¿Cómo de duro ha sido este golpe para la entidad?
Después de estar en la categoría 12 de las 14 últimas temporadas, volver a la categoría autonómica ha sido una situación difícil, pero estamos intentando rehacernos para regresar lo antes posible de la misma manera que las ocasiones anteriores, en las que se recuperó la categoría perdida en una sola temporada.
En 2012 el Marítim acudió por primera vez al COTIF y lo hizo como equipo de Segunda División. Ahora vuelve a Els Arcs como equipo de Liga Autonómica Valenta. Más allá de categorías, ¿cuál ha sido el cambio más significativo entre ambas fechas?
En estos 9 años ha habido muchos cambios, desde la posibilidad de un ascenso a la Primera División hasta el último descenso. También la creación de categorías de formación por parte de la Federación, aunque nosotros ya teníamos la escuela organizada por edades desde el origen, ha sido un avance importante en la evolución del fútbol femenino en la Comunitat Valenciana ya que ha facilitado el acceso a muchas niñas.
En la temporada 18/19 se produce una reestructuración de categorías que afecta directamente al Marítim, que pasa de jugar en la segunda categoría nacional a la tercera, sin ocupar puestos de descenso en liga regular. ¿Qué opina de la reforma que se produjo en las categorías nacionales? ¿Cree que era necesaria?
No era necesaria en la manera en la que se produjo ya que se habían intentado distintas propuestas en la última década que no eran tan drásticas. Pasar de siete grupos que había hace unos años en Segunda División a solo dos, condenó a perder la categoría a muchos equipos que no tenían el potencial económico o el respaldo de un equipo masculino profesional que, precisamente, eran los que a lo largo de las últimas décadas habían apostado por el fútbol femenino y tuvimos que pelear contra muchas adversidades.
Con el paso de los años los equipos independientes femeninos han visto más difícil ocupar categorías muy altas (actualmente en Primera División solamente hay tres). Desde su experiencia, ¿cuáles son las mayores dificultades de un club sin respaldo masculino en su estructura?
Por un lado, está el aspecto económico, pero también influye la infraestructura que pueden tener los equipos dependientes y, no hay que olvidar, el poder que tienen algunos clubes en las instituciones al tener equipos masculinos muy reconocidos.
Hay quien opina que los clubes independientes molestan en las primeras categorías. ¿Qué visión tiene sobre esto?
Pienso que lo que se pretende es una liga atractiva para el público no habituado al fútbol femenino atrayéndolo con nombres conocidos, de manera que sí, los independientes sobran y molestan. Molestan porque no estamos coaccionados por un club más grande condicionado a los intereses del masculino. Tenemos libertad para defender nuestros intereses y los del fútbol femenino sin rémoras dentro del mismo club y también dentro de las instituciones.
Cuando un equipo se nutre necesariamente de la cantera sabe que puede haber altibajos en diferentes momentos en función de la salud que gocen las categorías formativas. ¿Cómo se encuentran actualmente las categorías inferiores del Marítim?
Gozan de buena salud resaltando que no realizamos pruebas de acceso, pues somos una escuela de formación. Participamos en todas categorías Valenta y nos centramos en el desarrollo y la formación de las jugadoras.
¿Debe ser un objetivo primordial para el Marítim la vuelta a la categoría nacional lo más rápido posible?
Por supuesto. Como he dicho antes, el objetivo de la escuela es formativo, sin embargo, si nos fijamos en los objetivos de rendimiento del club, el principal es el retorno del primer equipo a las categorías nacionales.
Como presidenta durante estos años se habrá marcado objetivos para ir cumpliéndolos con el paso de las temporadas. Ahora mismo, ¿cuáles son los más inmediatos?
El objetivo general es mantener un club en el que se ofrezca la oportunidad a todas las niñas, chicas y mujeres de practicar el deporte que les gusta sin trabas. También llevar al primer equipo a la máxima categoría posible siempre teniendo en cuenta nuestras posibilidades, siempre tratando de cumplir los objetivos con unos recursos sostenibles en el tiempo.
En el Cotif se enfrentarán a tres clubes potentes que navegan en cotas superiores. ¿Qué papel cree que puede tener el Marítim en esta edición?
Como siempre, saldremos a competir cada partido independientemente de la categoría del rival, teniendo en cuenta que, dadas las fechas, son partidos de pretemporada y que nuestro mayor objetivo es mejorar de cara al inicio de la competición y, con un equipo muy joven, implementar el carácter luchador y competitivo de los orígenes del club que nos ha llevado a permanecer tantos años en categoría nacional.
Fotos: Julio G. Milat / CFF Marítim / Esportbase
Texto: Raül Barberà / COTIF