Anita Marcos (2000), llegó al Valencia hace alrededor de un mes en forma de cesión, procedente del Atlético de Madrid. La delantera continúa buscando oportunidades para crecer y progresar en su carrera y, tras unas semanas de adaptación, poco a poco va sumando minutos en el cuadro che. Marcos ha atendido a ESPORTBASE para contar cómo son sus sensaciones.
ESPORTBASE. Empezó usted jugando en el Santa María de la Caridad, de ahí pasa a Pozuelo y Torrelodones y ya firma por el Atlético de Madrid. ¿Cómo ha influido este proceso de formación a su carrera para ser lo que es ahora?
ANITA MARCOS. He estado en equipos más humildes y eso creo que me ha hecho valorar todo lo que he podido conseguir. Cuando estaba en esos equipos no tenía esa presión de estar en un Atlético de Madrid o en un Valencia. En esos momentos no piensas en lo que puede llegar, sino que te centras en disfrutar. En esos equipos me he movido en un rango de edad entre siete y 13 años y ahí, no te planteas que el fútbol llegue a ser un trabajo como lo es ahora para mí.
EB. Usted como delantera, ¿qué referentes futbolísticos tenía cuando era una niña?
MARCOS. En esa época se televisaban muchos menos partidos de fútbol femenino y yo siempre he tenido como ídolo a Fernando Torres. Siempre me he fijado en él, en lo que representa. A mí me encantaba verle jugar. Según creces, vas teniendo otros referentes como por ejemplo Jennifer Hermoso. He podido compartir vestuario con ella y para mí es una jugadora de la que aprendí muchísimo.
EB. Ha hablado usted de la presión que se tiene en un Atlético de Madrid. ¿Cómo digiere ese salto cuando pasa a formar parte del Atleti?
MARCOS. Yo creo que al final no era consciente de dónde estaba. Yo llego al Atlético de Madrid después de pasar por el Torrelodones, que es un equipo más humilde. Llegas ahí y, aunque eres consciente de dónde estás, estás ahí para disfrutar y demostrar. Llegas para ser la jugadora que eras hace un año cuando se interesaron en ti. Sí hay presión porque estás en un gran club, pero disfrutas y aprendes de ese proceso y de las jugadoras que te acompañan.
EB. Ganó dos campeonatos de Europa Sub-19 con la selección española. ¿Qué recuerdos se lleva de esa etapa?
MARCOS. Recuerdo esa etapa con mucha felicidad. Cuando era pequeña no me había imaginado el poder ganar dos europeos con la selección. El primero fue en Irlanda del Norte y ese lo recuerdo porque jugaba con jugadoras como Aitana Bonmatí o Patri Guijarro. Yo era sub-17 y ellas sub-19 y tuve la suerte de ir con ellas. Aprendí muchísimo.
Después, el segundo fue en Suiza y de ahí destaco la piña que hicimos. Había un gran equipo y el ambiente era muy bueno. En el primero yo estaba con gente más mayor y eso lo ves de forma diferente y claro, en el segundo era todo gente de mi edad. Poder haber compartido vestuario con ellas ha sido algo crucial en mi carrera.
EB. Al no tener en el Atlético los minutos que tal vez deseaba o necesitaba, decide marcharse al Celtic. ¿Fue muy difícil tomar esa decisión?
MARCOS. Fue complicado porque implica irte de tu país. Estábamos también en febrero con los equipos ya cerrados y tuve que tomar esa decisión por mí, mi crecimiento y por buscar una continuidad para seguir creciendo. Quería volver a disfrutar y ser yo misma. Escocia es un país distinto en todo. Fue difícil, pero todo es acostumbrarse. Estuve un mes, solo jugué dos partidos porque llegó el confinamiento, que lo pasé en gran parte allí. Y después tomé la decisión de volver allí en una segunda etapa.
EB. Muchas veces no se piensa en la presión que puede sufrir una jugadora cedida que tiene la necesidad de demostrar. ¿En algún caso lo sintió así?
MARCOS. Creo que sí que sientes esa presión, pero no por el hecho de demostrar a la gente. La persona que tiene que estar segura y con confianza eres tú misma. Si sales a jugar por ver lo que piensan los demás, nunca vas a hacerlo bien. Lo que he aprendido cuando he salido de España es que tú eres quien te va a acompañar. Hay que trabajar por y para ti y para aportar al equipo. Si quieres seguir creciendo, tienes que superarte cada día sin importar lo que diga la gente. Habrá quien te apoye y quien te critique y la confianza en uno mismo es fundamental.
EB. Tras el Celtic, llega el Valencia. ¿Qué vio en el club che que le animó a seguir su carrera aquí?
MARCOS. Bueno, pues la verdad es que el Valencia es un equipo que es muy joven y puede seguir creciendo. Somos jugadoras muy jóvenes que podemos absorber muchas cosas y aprender mucho. Eso me llamó. Además, el Valencia es un club muy grande, una ciudad muy atractiva y además, tengo muchas amigas aquí y están muy contentas, eso me dio confianza. Quería volver a España porque la pandemia en Escocia estaba muy mal, se paró la liga y cuando surgió la opción del Valencia, no me lo pensé.
EB. Es díficil llegar a un equipo a mitad de la temporada con un equipo ya asentado.
MARCOS. Es complicado. Tienes que empezar de cero, conocer al equipo y al cuerpo técnico muy rápido. Parece pretemporada, pero no lo es. Yo sinceramente, llevando un mes, no habría pensado que podría adaptarme tan rápido. He notado que el cuerpo técnico me ha querido ayudar desde el primer momento. Esto depende de cada jugadora, pero estoy sorprendida por lo bien que me veo.
EB. Está siendo una temporada muy compleja y atípica. Muchos partidos aplazados. ¿Cómo se veía eso en Escocia y cómo se vive ahora que está usted en España?
MARCOS. Cuando estaba fuera, realmente no ves nada extraño. Pero estando dentro, sí que ves cosas raras. En Escocia por ejemplo nunca se canceló un partido por Covid cuando yo estuve. La situación es la que es, pero todos los equipos necesitan sentir ese apoyo, pero también esa igualdad. Si un equipo juega con un caso, que se juegue siempre en esas circunstancias. No se puede discriminar porque eso no es justo.
EB. ¿Cuál diría que es el momento más duro que ha pasado?
MARCOS. La época más complicada la viví en el Atlético. Trabajaba y entrenaba mucho, pero la oportunidad no llegaba. Eso es duro. A veces sientes que no se ha valorado tu trabajo o que no se te recompensa como necesitas para competir y seguir creciendo. Es una época que me marcó y de la que salí mucho más fuerte.
EB. Y por último, ¿una meta que quiera alcanzar a nivel alcanzar?
MARCOS. Sinceramente, volver a disfrutar, a sentirme yo en el campo. El fútbol es un estado ánimo. Si estás bien jugando a fútbol, todo lo demás irá bien. Ahora estoy encontrando la felicidad porque veo que otra vez se valora lo que hago y yo valoro todo lo que tengo. Ese es mi objetivo, ser feliz, disfrutar y no dejar de trabajar.
Fotos: Juan Catalán / VCF Femenino