¿Qué significa que un espacio esté ‘cardioprotegido’?

Foto: FFCV

Se ha convertido en uno de los grandes objetivos a lograr por instituciones y organismos vinculados a la formación y al deporte base en nuestro país, pero… ¿sabemos lo que significa realmente la ‘cardioprotección’? Hablamos de una tendencia emergente orientada a «la protección del corazón en caso de episodios cardíacos», que se están convirtiendo en una verdadera psicosis en los últimos años para padres y formadores.

El gran número de muertes por paro cardíaco en la población están animando cada vez más a gobiernos, empresas, entidades y asociaciones a concienciar a la población y tomar medidas que permitan revertir la situación gracias a la creación de zonas o espacios cardioprotegidos.

Como su nombre indican, estas zonas cuentan, como mínimo, con tres elementos fundamentales:

  • un desfibrilador,
  • su mantenimiento garantizado, 
  • personas adecuadamente formadas para poder garantizar una rápida actuación en caso de paro cardíaco repentino (para conseguir que vuelva a latir el corazón de la persona afectada), hasta la llegada de los servicios médicos de emergencia.

Para que las posibilidades de supervivencia ante un paro cardíaco repentino sean óptimas, se debe realizar de forma inmediata una resucitación cardiopulmonar (RCP) que permita mantener el flujo necesario de sangre oxigenada al cerebro hasta que se restablezca el ritmo cardíaco normal mediante la descarga eléctrica suministrada por un desfibrilador.

Según indican los expertos, el tiempo máximo para aplicar la desfibrilación a una persona que ha sufrido un paro cardíaco repentino es de un máximo de 5 minutos.

Hay identificados cuatro pasos críticos para tratar el paro cardíaco repentino, denominados Cadena de Supervivencia:

1. Reconocimiento y llamada al servicio de emergencia
2. Una rápida resucitación cardiopulmonar (RCP)
3. Desfibrilación temprana
4. SVA y cuidados post-resucitación

Estadios de fútbol, polideportivos, pistas de atletismo o escuelas de formación deportiva son solo algunos recintos cuya cardioprotección garantiza disponer de todas las herramientas básicas necesarias para combatir un posible caso de ‘muerte súbita’ hasta la llegada de los servicios de emergencia. Una reclamación habitual desde hace años y que, por ejemplo, la FFCV se ha tomado muy en serio en la temporada 2019-2020.

Foto: FFCV

El ente federativo anunció este lunes un acuerdo con B+SAFE, partner de Philips en España, empresa que ha patentado la solución DOC® (Desfibrilador Operacional Conectado) única en el mercado que ofrece todas las soluciones integradas en el propio equipo que permanece conectado y operativo las 24 horas del día. El desfibrilador semi-automático Philips se completa con un modelo de comunicación que dispone de tarjeta SIM y GPRS para dotarlo de telecontrol, tele-asistencia directa, geolocalización y conexión preferente con el 112.

A los equipos de emergencia se le une la necesidad de una formación adecuada. B+SAFE proporciona también formación de la máxima calidad impartida por instructores del Plan Nacional de RCP, todos enfermeros o técnicos de emergencias en activo, homologados para impartir los cursos de RCP/SVB y uso del DESA con todas las garantías, mediante un enfoque práctico y lo más cercano a la realidad desde su experiencia constatando lo importante y fácil que puede llegar a ser dicho conocimientos para salvar la vida.

Autor / 1848 publicaciones

Fundador y director de ESPORTBASE Media desde 2015. Periodista, educador y deportista. Tras una década con los 'mayores', descubrí lo satisfactorio que es inculcar valores deportivos y personales a los niños. Mi padre fue mi héroe.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *