Salva Pons, presidente del Patacona | Foto: Paco Polit
El zumbido de emoción se ha escuchado en el coqueto campo del Patacona durante toda la semana. Caen los días pero nadie deja de hablar de ‘el partido’. Un choque que medirá el próximo domingo a mediodía (12:00 horas) a Patacona y Valencia CF en el campo pataconero con mucho en juego: los locales tienen a tiro el ascenso a la categoría Juvenil División de Honor, mientras que los de Angulo desean el triunfo para seguir apretando al Hércules -líder de Liga Nacional Grupo 8 y ya ascendido a División de Honor- en busca del título de campeón.
«Es el mejor partido de Liga Nacional que se puede ver», insiste Salva Pons desde su despacho. El presidente del Patacona vive días de excitación por lo sorprendente de la gesta que está protagonizando su Juvenil ‘A’: «Si te gusta el fútbol juvenil y el fútbol base, no hay mejor cita que ese Patacona-Valencia. El Valencia se juega la Liga y nosotros nos jugamos el sueño inesperado del ascenso a División de Honor», agrega.
¿Inesperado? Y tanto. El objetivo de la temporada para ese grupo de chavales no fue el ascenso. Nunca lo fue. «Es una Liga muy competitiva y, hasta hace poco, Fito (el director deportivo) y yo no hacíamos más que mirar la tabla en busca de la salvación matemática«, explica. Pero el paso de las jornadas hizo que el grupo cada vez se lo creyera más y más, hasta llegar a los últimos 6 puntos en juego con todas las opciones intactas. 52 puntos para el Patacona, 52 puntos para el CD Castellón (el otro gran aspirante al ascenso). Y el goa-average favorable a los pataconeros. «Dependemos de nosotros. Ganar los dos partidos nos haría de División de Honor, y eso son palabras mayores».
Patacona Juvenil ‘A’ | Foto: CF Patacona
La evolución esta década para el club (recordemos, fundado en 2008) ha sido meteórica. «Primero fue Superliga en fútbol-8, luego Preferente, luego Liga Autonómica en fútbol-11, luego Liga Nacional Juvenil… Estamos compitiendo con grandes escuelas como Hércules, Valencia, Castellón, Don Bosco… con una camiseta y un escudo que hace diez años estábamos diseñando», recuerda Pons. Todos sus equipos de referencia están en categorías y divisiones de privilegio, a falta de rematar la faena con el Cadete B, que persigue su ascenso a Preferente. Tampoco ha sido nada sencillo «consolidar al Cadete A en Liga Autonómica», pero a nivel global la satisfacción del devenir de la temporada es absoluta.
«Esta semana es para estar super emocionado, el fútbol tiene sentido por partidos como el del domingo», insiste el presidente. «Son los jugadores los que quieren subir, nosotros no les hemos presionado» para lograr alcanzar un éxito que nadie podía imaginar en septiembre. Y a ese grupo no hace falta animarles a rematar la faena: «Ellos están más motivados que nadie».
Ascenso del Amateur a Primera
Las alegrías en el Patacona, en caso de ascenso a División de Honor, serían múltiples. Por el momento, uno de los grandes retos -el ascenso del Amateur a Primera Regional– ya se logró la semana pasada. «Nos quedaba la pata del Amateur porque muchos jugadores que estábamos formando tenían que irse a otros clubes a continuar su trayectoria. Ahora estamos más cerca del nivel que tenemos en la escuela, tras el ascenso a Primera Regional. Segunda es una categoría muy complicada, así que aspiramos a seguir creciendo con este grupo», recalca Pons.
Lo deportivo ha pasado a cobrar una nueva dimensión para el presidente del Patacona, quien desde el pasado mes de diciembre forma parte de la nueva Junta Directiva de la FFCV presidida por Salvador Gomar. ¿Qué ha aprendido en sus primeros meses como dirigente? «Perspectiva. Te das cuenta del mucho trabajo que se realiza en Valencia, Alicante y Castellón. Somos todos uno. El equipo en la Directiva de FFCV es fantástico, no deja de hacer cosas y cada vez con más ilusión«, reconoce. «Estar en FFCV te da una perspectiva más amplia, no sólo sobre los clubes que nos vemos todos los días. A la Federación le preocupan todos los equipos, y eso es muy bonito de ver», remata.
Patacona Amateur | Foto: CF Patacona