Torres, a la izquierda, en la presentación de la temporada pasada | Foto: Julio G. Milat
Un lunes plomizo, lluvioso, gris y en el que una profunda tristeza recorrió el fútbol de formación de los Poblados Marítimos. El Cabanyal amanecía con la noticia del fallecimiento de Emilio Torres, vicepresidente del Marítimo Cabanyal y una figura muy conocida en el deporte base de la zona. Su compañero y amigo Rafa Tarín, presidente del club, le recordó en ESPORTBASE Radio (99.9 FM Valencia) y destacó que «va a ser durísimo» para amigos y conocidos seguir adelante tras su muerte.
«Emilio y yo nos conocíamos desde hace 28 años. Para mi no era el vicepresidente del Marítimo: era mi amigo, mi hermano. En mi vida particular era un soporte enorme, me resisto a hablar de él en pasado. Va a ser muy difícil, se nos ha ido algo de dentro del alma. Estamos obligados a continuar por él», explicó con la voz entrecortada.
Horas antes, en el Tanatorio de Serrería, el recinto se quedó pequeño para recibir a decenas de personas y clubes que acudieron a presentar sus respetos al difunto: «Había muchísima gente, de muchas escuelas amigas nuestras: Malilla, Torrefiel… Queremos agradecer a la Federación su apoyo, a Consuelo, al candidato a asambleísta Salvador Gomar y todos los que vinieron», agregó.
Al recordar la figura de Torres, el presidente del club cabanyalero no podía evitar emocionarse: «Son momentos de mucha tristeza. Emilio era el Marítimo Cabanyal, tenía los valores que siempre hemos querido inculcar: amistad, respeto, espíritu de sacrificio, espíritu de pertenencia… Nadie puede hablar mal de él, siempre resolvía todos los problemas, era un ‘solucionador’ de problemas. Estuvo muchos años dedicado al fútbol base, al fútbol de barrio. En el club decimos que nuestra misión no es formar jugadores, sino personas a través del fútbol», relató Tarín. El dirigente también recalcó que «Es bueno que la gente recuerde lo que era Emilio Torres» y lo que supuso para el deporte en el barrio.
La vinculación de Torres con el fútbol entraba también a nivel familiar: su hija, Sonia Torres, es la actual presidenta del CFF Marítim; y su viuda, Conchín, es directiva del club femenino. «Ambos hemos tenido siempre esa vinculación con el CFF Marítimo, Sonia es mi nuera, está casada con mi hijo», explicó Tarín, «compartimos campo y somos escuelas hermanas. Emilio y yo tuvimos la suerte de tener vinculación a ambas».
Ahora, toca reponerse del golpe y mirar al futuro sin olvidar nunca su figura. «Vamos a hacer algo muy grande para honrarle, como era él», anunció el presidente. «La presentación de la escuela 2018-2019 estará dedicada a Emilio, es lo mínimo que podemos hacer. Este fin de semana, en los partidos amistosos que disputaremos llevaremos a cabo un minuto de silencio. Es muy duro apenas decir esa frase. No me lo creo aún, sigo pensando que lo tengo aquí al lado. Estaba esta tarde en el club y me sentía como si lo tuviese a mi lado», concluyó.