Texto: Raül Barberà / COTIF
¿Quién no ha escuchado aquello de “de Guatemala a guatepeor”? Para Ana Lucía Martínez Maldonado (Ciudad de Guatemala, 1990), Analu en el mundo futbolístico, natural del país de América Central, esta frase no es una más. “Al principio me lo decían mucho, ahora lo he escuchado mucho menos pero me parece una frase mal utilizada y algunas veces ofensiva”, dice quien llegó a España en 2014 en busca de un sueño que en su país de origen no era posible ni conseguir ni creer real: “Creo que como personas muchas veces en nuestros países de origen no encontramos las oportunidades que deseamos y que afortunadamente en otros países las encontramos”.
Guatemala es uno de los fijos en las listas de naciones más peligrosas. En un estudio realizado por el Ministerio del Exterior figura junto a otros, Honduras o El Salvador, por ejemplo, recomendando “viajar con extrema precaución absteniéndose de hacerlo por determinadas zonas”. La corrupción está afectando de una manera muy grande al país y Analu añade que “la inseguridad es un problema que aún no se ha solucionado”.
Siempre ha sido pionera en muchos aspectos. Fue la primera jugadora guatemalteca que dio el salto a Europa para luchar por ser profesional, también es la primera representante del país que juega en el torneo de Els Arcs. “No ha sido nada fácil”, admite quien describe como “muy largo” el camino seguido hasta llegar donde está. Su lucha no es solo personal, quiere que en un futuro no muy lejano las niñas y niños del país sepan que nada es imposible. “Quiero demostrarles que los sueños se pueden cumplir con esfuerzo y dedicación”.
En Guatemala su vida deportiva en Europa no pasa desapercibida. No es extraño ver como informativos deportivos o periódicos abren la sección de deportes con alguna reseña o noticia sobre su compatriota. “En Guatemala cada vez siguen y reconocen más mi trabajo, estoy muy agradecida por el cariño que me demuestra la gente y espero seguir representando a mi país de la mejor manera”.
Pero no solo es imagen en los medios por lo deportivo. Hace poco más de un mes participó en la campaña “Métele un gol al machismo”, organizada por el Organismo Judicial (OJ), en la que la delantera tuvo una participación especial. “Tuve la oportunidad de ser imagen en la campaña impulsada en mi país ya que soy futbolista y he roto muchos paradigmas sociales y culturales”. Una campaña que “utiliza al fútbol como medio para promover cambios en los patrones culturales machistas y que existan relaciones de igualdad entre hombres y mujeres para una vida libre de violencia”, detalla.
Desde hace unos días viste unos colores nuevos, los del Madrid Club de Fútbol Femenino, un cambio que define como “un nuevo reto en mi carrera” que afronta con “muchísima ilusión” y ganas de “poder aportar lo máximo y ayudar a mejorar su rendimiento en cuanto a la temporada anterior”. Cuatro años han pasado desde su aterrizaje en España, vía Dínamo Guadalajara de Segunda División procedente de Estados Unidos, la mejor competición femenina del mundo futbolístico, un lugar donde las mujeres son verdaderas estrellas del balompié. “Antes de llegar al Dínamo estuve 3 meses entrenando en Estados Unidos y formando parte del Houston Dash, lo que hizo darme cuenta de que quería darle una oportunidad al fútbol y fue un amigo quien en principio me ayudó a contactar con un equipo español y fue el Dínamo de Guadalajara quien me dio la oportunidad de estar en su equipo”.
Poco duró su presencia en Segunda. El Rayo Vallecano, un histórico, se fijó en ella para su proyecto de Primera División. En el club del barrio madrileño, a pesar de unos problemas burocráticos que le impidieron empezar la liga y retrasaron su debut hasta noviembre, disputó más de 1.600 minutos repartidos en 19 encuentros en los que logró 3 tantos. Del centro al sur. De la franja al club blanquiazul. Del Rayo al Sporting Club de Huelva. Analu firmó por el club onubense en 2016 donde ha permanecido las dos últimas campañas en las que ha acumulado más de 50 partidos (ya supera los 70 en la máxima categoría) y 4 goles.
El último de ellos, frente al Betis en la Ciudad Deportiva Luis del Sol, logrado tras recibir un balón en velocidad y elevarlo por encima de la portera, le valió para ganar el premio al mejor gol del mes de abril y mayo de la Liga Iberdrola otorgado por los espectadores de El Golazo de Gol, programa de la cadena televisiva del mismo nombre. Logro nada comparable con los que ha conseguido académicamente.
La delantera “chapina” es ingeniera química, máster en Economía y Finanzas y además posee el nivel I de Entrenadora. Y no quiere parar. “Este año tengo como meta estudiar algo en gestión deportiva”, afirma dando por sentada la trascendencia de su presencia en el Cotif y convencida de su importancia para “ganar confianza, hacer grupo y poder todas demostrar por qué nos han traído”, centrándose en las nuevas caras del equipo. Confía en que pronto más guatemaltecas y guatemaltecos crucen el océano y puedan pisar el feudo alcudiano: “En Guatemala hay mucho talento, hay que salir de la zona de confort y ser valientes”. Una valentía que ella ya demuestra con palabras, pero también con hechos.