Amarilla (izquierda), junto a su staff en la dirección del Manises CF | Foto: Mamen Borjas
Con la segunda edición del Torneo Roberto Amarilla en el horizonte, el actual presidente del Manises CF atiende la llamada de ESPORTBASE en pleno frenesí de actividad. Amarilla (Eusebio Ayala, Paraguay, 1981) aterrizó en el Valencia CF en la época gloriosa del club che a principios de siglo, y de ahí pasó por varios clubes (Burjassot, Alzira…) hasta convertirse en un emblema del fútbol regional valenciano, muy cerca de ascender como capitán del Huracán Valencia a Segunda División en dos ocasiones. Desde el año pasado, preside el Manises CF con el objetivo de renovar la entidad de arriba a abajo y convertirse en una referencia del fútbol base en l’Hora Oest.
ESPORTBASE: Segunda edición del torneo que lleva su nombre, imaginamos que puliendo últimos detalles para que sea un éxito.
ROBERTO AMARILLA: Así es, una vez termina el campeonato regular, se viene el torneo y hay mucho que solucionar, asuntos que cerrar… Ya estamos en plena cuenta atrás.
EB: Una cuenta atrás que va sumando cada día más equipos Alevines: Barcelona, Valencia, Atlético, Levante, Villarreal… y muchos equipos de Superliga.
AMARILLA: Es un torneo muy apetecible, y nuestro objetivo siempre fue hacerlo muy interesante. Pese a ser muy joven y llevar sólo dos ediciones, creemos que es un torneo muy apetecible y representativo de lo que es el Manises CF. Hemos hecho el esfuerzo económico y de gestión de traer a Barcelona o Atlético de Madrid, y todos quieren competir contra ellos.
EB: ¡Y no olvidemos el Alevín A del Manises CF! Campeón de Liga hace unos días con Marta Vivó como entrenadora.
AMARILLA: Es cierto que hemos empezado muy abajo con casi todos los equipos, nuestro objetivo el primer año de gestión al frente del Manises era crecer y estamos muy contentos. No sólo destaca la Liga del Alevín A con Marta al frente: también el Infantil C ha salido campeón y ha subido a Primera Regional, y el Cadete también ha sido campeón y ha ascendido. Ha sido un año muy positivo y la recompensa al duro trabajo esta temporada.
EB: Los más veteranos recuerdan al Amarilla jugador en el Valencia, más recientemente en Huracán… pero ahora usted se dedica a los despachos en calidad de presidente del Manises. ¿Qué tal la transición?
AMARILLA: Es complicada… (Risas). Siempre he jugado al fútbol y nunca ves el retiro, ni piensas que algún día lo dejarás. Me fui mentalizando y, viendo que me quedaba poco, pensé en lo que haría después. Siempre quise estar ligado al fútbol cuando me retirarse. Ser presidente es una experiencia nueva: siempre he estado en equipos importantes, pero llevar una escuela no tiene nada que ver con esas vivencias. Cuando eres futbolista, te lo ponen todo muy fácil, pero hay mucho trabajo fuera del campo. Ni en mis mejores sueños me había imaginado ser un presidente de un club.
EB: ¡Pero usted está para jugar! ¿Ayuda a los misters?
AMARILLA: Claro, me gusta estar fuera y controlar los entrenamientos. Me aburriría estando en la oficina. Salgo mucho al campo a ayudar a los entrenadores o corregir cositas a los niños. Con los cadetes entreno a diario, y también con los juveniles. Creo que ambos lo agradecen, y me pone muy contento ayudar a la gente. Nuestra escuela es así: humilde, trabajando mucho y corrigiendo errores que cometimos. De los errores se aprende y mejoraremos cada año. Creo que en Manises se están dando cuenta de que se están haciendo las cosas bien.
EB: Imaginamos que las instalaciones del Manises no tienen nada que ver con en lugar en el que usted empezó a jugar al fútbol en Paraguay…
AMARILLA: Lo hablo mucho con los padres, me preguntan si yo tuve estas facilidades para entrenar cuando era joven. Les digo que para nada: mi escuela fue la calle, descalzo, con caminos de tierra, con muchas heridas en las piernas… Eso intento inculcar a los niños: tienen que valorar lo que tienen y el esfuerzo de sus padres tanto a nivel económico como en tiempo que dedican. Hay que hacerles ver que son privilegiados por hacer un deporte sano y que les gusta, y deben aprovecharlo al máximo.
EB: ¿Cómo son esas charlas con los niños? ¿Bromean con usted o le respetan mucho por ser el presidente?
AMARILLA: Me respetan mucho, a veces demasiado… (Risas). A veces les hago bromas y las cogen a medias. Ellos me ven de otra manera, y me fastidia un poco porque yo soy un niño también por dentro… (Risas). Agradezco que me respeten y me escuchen tanto, porque a veces hay que echar alguna bronca. Me lo paso muy bien con ellos, el club es un sitio muy agradable.
EB: Una buena manera de dejar atrás la etapa de Huracán en Manises…
AMARILLA: Agradezco a los niños y a los padres la confianza que nos han dado, porque no era fácil aterrizar en el Manises CF después de la historia de Huracán y todo lo que conllevó. Huracán dejó ‘tocado’ al pueblo de Manises, y cuando llegamos había desconfianza de los padres. Pedimos un voto de confianza en su día, y la gente está muy contenta a fecha de hoy.