El fútbol base de Valencia y la Comunitat Valenciana al completo vuelve a abochornarse tras un nuevo episodio de violencia contra los árbitros que, por fortuna, pudo ser detenido antes de que pasase a mayores. Ocurrió el pasado fin de semana en La Vall d’Uxo, en el choque que medía al UD Vall d’Uxó y al Primer Toque CF en la decimoctava jornada de la Liga Infantil ‘A’ de Castellón.
El partido no tuvo demasiada historia (0-5), pero el suceso lamentable se produjo nada más finalizar, tal y como informó el portal Sindicato de Árbitros. En el acta del choque, el colegiado expone a la perfección lo sucedido:
INCIDENCIAS GENERALES
A.- PÚBLICO
Tras finalizar el partido y con los jugadores todavía en el terreno de juego, expulso al dorsal número 15 del equipo Local por doble amonestación. Debido a este hecho, el padre de tal jugador (identificado por la fuerza pública) penetra en el terreno de juego con el puño en alto con la intención de agredirme, teniendo que llegar a correr unos 50 metros para evitar tal agresión, a la vez que se dirigía a mí con los siguientes términos: “te voy a pegar cabrón de mierda”, “ven aquí hijo de puta, ven”, “te has cargado el partido”. Gracias a una parte del público que consigue retener a este espectador consigo evitar tal agresión.
Una vez ya en mi vestuario, una persona del público se identifica como Guardia Civil, aun así decido llamar a la fuerza pública para que se personara en las instalaciones lo antes posible, ya que corría en peligro mi integridad física. Unos 10 minutos después la fuerza pública se persona en las instalaciones para identificar al agresor y recoger mis datos, para una posterior denuncia ante la comisaría provincial de Policía Nacional de la localidad de Castellón.
Así, cabe resaltar el papel jugado por el público asistente, que logró retener al violento, y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, quienes identificaron al agresor para que el colegiado pudiese denunciar lo ocurrido. Actuaciones de lo más civilizado y colaborativo para responder a una lacra, la de la violencia en el fútbol base, ante la que hay que combatir cada fin de semana.