Imagen de archivo de un partido de fútbol sala en Ceuta | Foto: FFCE
Más allá de las alegrías diarias que nos proporciona, el deporte base también sigue dejándonos episodios tristes que ponen a prueba nuestra capacidad de sorpresa. El último caso tuvo lugar esta misma semana en Ceuta, donde su Federación de Fútbol (FFCE) sancionó a seis entrenadores y monitores de cuatro equipos de benjamines por «inducir» a sus jugadores -en edades de 8, 9 y 10 años- a que no ganaran el partido que tenían que disputar, incluso marcando goles en propia portería.
Según la resolución del Comité de Competición, los entrenadores han sido sancionados a raíz de los partidos disputados el fin de semana del 1 y 2 de octubre correspondientes a la categoría de benjamines de fútbol sala.
El colegiado del encuentro, así como un informe emitido, reflejó que en dos de los partidos disputados «queda claramente probado que los jugadores de ambos equipos actuaron con evidente y reprobable intención de perder el partido, incluso marcando goles en propia portería, y adulterando con ello el resultado final del mismo», afirma la resolución. «Dicha actitud inducida por los monitores debe considerar de infracción muy grave al tratarse de jugadores de tan corta edad», agregó el trencilla en su análisis.
Por todo ello y de acuerdo con el Reglamento General, Estatutos y Código Disciplinario de la RFEF, se ha acordado anular los dos partidos y declararlos no celebrado, fijar nueva fecha para su celebración y designar Delegado Federativo para que junto con el colegiado velen por el correcto desarrollo del partido. Advierte el Comité que «en el supuesto de reincidencia en las conductas tipificadas como muy grave, ya sea por conducta descrita anteriormente o por incomparecencia al partido programado, se sancionará con baja de la competición».
El Comité ha suspendido por tres meses y una multa de 108 euros a los monitores Francisco V., del IES Camoens; Mohamed M., del Manzanera; Manuel S., del Inmaculada Atlético; Damián S. Albarracín José Carlos S. y Mustafa A, estos tres últimos pertenecientes al club San Agustín. En uno de los partido el Camoens derrotó a su rival por tres goles a uno y en el segundo el Inmaculada Atlético se impuso al San Agustín por un gol a cero.
Fuentes de varios clubes han explicado que los equipos actuaron de esta manera porque en caso de perder jugarían en Segunda División -donde los rivales son más accesibles- y de ganar lo harían en Primera División, junto a los teóricos candidatos al título de liga y lógicamente con mayor potencial deportivo. La diferencia entre ambas categorías se determina por una primera fase donde se suman los puntos computados en tres partidos.